Con este número de Fusión se cumplen dos años, y como verán no nos agrandamos (ni Fusión, ni yo), no estamos en color, no hay sorteos ni premios, y seguimos con el mismo sentimiento de la idea primaria, en ese firme ideal, que las experiencias de la vida en apariencia negativas no han podido modificar en su esencia, por el contrario nos fortalece. Siempre tuve y tengo el deseo de un mundo mejor, y no me quedo esperando que mágicamente todo se acomode ante mi vista, trabajo desde mi humilde lugar para que esto se manifieste. Siempre estuve acompañado por afinidad con amigos/hermanos que creen en esta energía puesta en cada letra y me ayudan a plasmarla, para ellos todo mi agradecimiento.

Fusión nació para intentar: potenciar la búsqueda del Sol interno, acelerar el tan querido cambio de conciencia, promover la distribución equitativa y el fin de la pobreza material y afectiva, por el respeto al individualismo sin egoísmo, por la verdad, la honestidad, y por todos esos valores que hoy nos parecen utópicos o perdidos, para evitar las diferencias de cualquier tipo que sirvan para separarnos, sean políticas, religiosas, deportivas, de clases y en definitiva de ideas... por querer plasmar este ambicioso sueño!!

Si bien nos apremian urgencias de todo tipo, siempre habrá un lugar en la intención del corazón para llevar alguna palabra de aliento, sea propia o ajena, para aquellos que creen en lo que no se ve, para los que sienten, sufren y ayudan a otras almas, para esos guerreros silenciosos de la Paz y el Amor.

No sé bien cuáles serán mañana los designios que la ilusión de la vida decrete para mí, ni sé si mi tercer hijo (Fusión) aún estará aquí, pero sé que como tal, lo he dotado de lo mejor que tuve y tengo, con el fin de que esa semilla se reproduzca en algún otro corazón que lleve la posta, y que continúe como el agua, oradando la piedra...

«círculos en los campos de trigo».

Una noche, en el mes de agosto de 1.972, después del avistamiento de un OVNI, una energía desconocida imprimió en un campo de trigo el molde de su forma. Shuttlewood, considerado actualmente una de las figuras más eminentes en la historia reciente del fenómeno y testigo de innumerables avistamientos OVNI en los últimos 45 años, lo describió así: «Las espigas se recostaron con la gracia con que una dama abre o cierra el abanico, y en menos de un minuto se formó ante nuestros ojos un círculo perfecto acompañado de un sonido muy agudo.

Era el 15 de agosto de 1972 cuando se verificó este episodio en Warminster (Inglaterra). Pero los dos hombres no podían imaginar que aquel día sería considerado la fecha de nacimiento de un fenómeno que, desde entonces y sucesivamente, se repetiría muchas otras veces, teniendo hasta la fecha al mundo asombrado y perplejo sobre el gran misterio de los círculos en los campos de trigo. Sucesivamente, desde aquel fatídico día, los círculos aparecieron regularmente; al principio, eran meros círculos, relativamente pequeños; pero, desde 1.985, empezaron a formarse grupos compuestos. De 1.987 a 1.989, aparecieron docenas, y, desde entonces, cientos, sobre todo en los Condados de Wiltshire y de Hampshire. En 1.990, se verificó un notable salto de calidad y cantidad: 1.200 círculos en todo el país e informaciones cada vez más ricas y elaboradas. En 1.991, el número en su conjunto se cuadruplicó. Los círculos aparecen en campos cultivados con varias especies de cereales: trigo, cebada, avena, centeno, colza, etc., así como en los pastizales de hierba alta, durante el período que va de mayo a septiembre, o sea, cuando los tallos han alcanzado una cierta altura y el grano está maduro, o casi maduro. Su diámetro varía desde 50 centímetros a 45 metros, y las formaciones más extensas alcanzan hasta 600 metros de largo, llegando a recubrir hasta 10.000 metros cuadrados de superficie. La característica que más sobresale es la extrema precisión con que son impresos y el sentido en forma de espiral con que, los tallos quedan colocados en el terreno. La circunferencia es nítida, como efectuada por un enorme compás. El grano, además, no resulta nunca dañado y los tallos acostados no están ni doblados ni rotos y continúan creciendo en posición horizontal. Algunos círculos se han formado con varias capas de espigas dobladas en espiral, orientadas en uno y otro sentido alternativamente.

En Australia, las primeras apariciones se iniciaron en 1966; en Inglaterra, a partir de 1972. El testimonio más antiguo se remonta al año 1678, relatándose en un manifiesto titulado «El diablo segador». Los mismos fenómenos han tenido lugar en Suecia, Alemania, Bélgica, Francia, Italia, Hungría, Bulgaria, Japón, Nueva Zelanda, Canadá, Estados Unidos y la CEI (ex URSS).

Thomas Roy Dutton, ingeniero jefe del sector de investigación de la «British Aerospace», colaborador en proyectos aéreos y espaciales, está convencido de que los círculos en los campos sembrados y los relativos pictogramas son productos mecánicos de una mente inteligente. Él afirma: ‘El cereal recostado no aparece nunca dañado en el interior de los círculos y, a menudo, forma canales que se entrecruzan. He analizado las espirales que se han formado en los círculos y he descubierto que todas se rehacían según un preciso modelo matemático; en efecto, dichas espirales se han ejecutado en base a una verdadera y precisa ley matemática».

John Michell, estudioso inglés de la geometría sagrada, declara: «De hecho, son más bien insólitas las consecuencias que estamos viendo. Algo o alguien empieza a dibujar símbolos en los campos sembrados, y además lo hace de modo armonioso y bello, sin asustar a la gente, sin amenazarla, sino más bien ejerciendo sobre quien lo observa una influencia positiva y benéfica que lo hace mejorar interiormente y transforma su anterior visión del mundo».

El conocido crítico de arte lon-dinense, John Macfwen, llega a la siguiente conclusión: «Es hasta demasiado evidente que no se trata de obras creadas por el hombre. Y si no son producto de la razón y del intelecto humano, no pueden haber brotado mas que de una inteligencia no humana, o sea, de la esfera de los espíritus puros, no de los espíritus corrientes, como aquellos que son invocados por los médium en sus sesiones, sino de una esfera superior. Ello se deduce de la belleza y habilidad artística que demuestran en la ejecución de los símbolos que provienen de un mundo espiritual más elevado; en otras palabras, del mundo de los Dioses. Cada vez que el Creador quería comunicarse con los humanos, se servía de Mercurio, el Hermes de los griegos; él era el trámite. Así pues, el artífice de estos círculos es una inteligencia muy elevada que proviene del mundo de los Dioses. ¿ Y qué nos quiere comunicar? Creo que todos nosotros ya lo sabemos, porque la finalidad y la consecuencia del mensaje es un cambio interior, una dilatación de nuestra conciencia, una nueva forma de pensar sobre el modo de considerar la Tierra, sobre cuál debe ser nuestro sitio en ella y sobre cómo y cuánto la hemos de comprender. Nuestras facultades perceptivas deben ser cambiadas y mejoradas".

Por consiguiente, la razón y la expresión artística espiritual y creativa ofrecen una idea unitaria de una inteligencia superior expresada en los pictogramas de los campos sembrados: Seres de otros mundos están entre nosotros y nos lo quieren recordar.

En los años 80, superando el límite existente en las matemáticas sobre el modo analítico de describir los procesos complejos de la naturaleza, fue desarrollado un nuevo concepto matemático: el ‘’fractal’’. Gracias a los estudios del matemático polaco, Bonoit Mantelbrot, profesor de la Universidad de Cambridge, se descubrió que simples fórmulas matemáticas, representables con la ayuda de ordenador gráfico, pueden originar formas complejas e inesperadas que, analizadas minuciosamente, muestran analogías sorprendentes con la estructura que conocemos en la naturaleza.

El 13 de agosto de 1991, en lketon, en los alrededores de Cambridge, el piloto Steven Cherry Downes avista un nuevo pictograma, pronto denominado el «Mantelbrot-Set». El «Mantelbrot-Set» de lketon constituye una lógica conclusión sobre el desarrollo que han tenido, desde sus inicios hasta hoy, las composiciones de círculos en los campos sembrados. Las primeras eran de naturaleza más artística y representativa: más que «parecer» algo, «eran» algo. El símbolo de «Mantelbrot» va más allá; a través de un notable salto cualitativo, no puede ser entendido con los simples elementos de la geometría escolar. Nos conduce a la esfera de la teoría del caos, dé los «fractales», en la tecnología computarizada y del infinito. Esto quiere decir, en primer lugar, que detrás del caos se esconde un orden, puesto que en el mundo de los «fractales» el hombrezuelo con forma de manzana es la única isla estable en el océano del caos.

El antropólogo alemán Michael Hesemann, director de la revista «Magazin 2000", escribe: «Los círculos no son mas que un nuevo medio en que los extraterrestres quieren anunciarnos su retorno y, para evitar a nuestra cultura un terrible «shock» han elegido este medio dulce, refinado y de gran belleza, preparando a nuestras conciencias gradualmente y ampliando los horizontes».

Vivimos una época rica en inteligencias creadoras, cuyas expresiones han de acrecentar considerablemente nuestras vidas. Hoy cruzamos los mares merced a la fuerza desarrollada por el hombre, y empleamos también esa energía para aliviar a la humanidad del trabajo muscular agotador. Aprendimos a volar y somos capaces de enviar mensajes y noticias sin dificultad alguna a los más remotos lugares del mundo, por medio de ondas eléctricas.

No obstante, la producción y distribución de bienes se halla por completo desorganizada, de manera que la mayoría ha de vivir temerosa ante la posibilidad de verse eliminada del ciclo económico, y sufrir así la falta de lo necesario. Además, los habitantes de las distintas naciones se matan entre sí a intervalos regulares, por lo que también, debido a esta causa debe sentir miedo y terror todo el que piense en el futuro. Esta anomalía se debe al hecho de que la inteligencia y el carácter de las masas son muy inferiores a la inteligencia y al carácter de los pocos que producen algo valioso para la comunidad. Confío en que la posteridad lea estas afirmaciones con un sentido de justicia y la necesidad de un cambio en la situación.

                                                                                                                                                                                                                        A. Einstein (1939)

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Enseñanzas de Kung Fu

Anciano: Escucha joven, traigo estas velas para vender, yo mismo las hice...

                                                                                  Elaborado por M.Marión

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Entre rosas y espinas

Vivimos un tiempo turbulento, un tiempo de crisis, un tiempo en el cual todo parece acelerarse y al mismo tiempo confundirse, y en medio de esa confusión aparecen como destellos de luz, hechos nuevos entremezclados con sucesos que repiten y repiten las viejas formas. No es fácil despojarnos de las cargas acumuladas, son como energías que fuimos incorporando y que desde algún lugar se resisten a dejarnos, como si se hubiesen alquimizado con nuestra propia materia formando una unión casi indestructible. Felizmente en ese "casi" tenemos toda la gama de posibilidades que abre nuestra libertad de elección, nuestra posibilidad de cambiar la historia, de ser diferentes, de tender una mirada compasiva hacia el pasado y una mirada positiva hacia el futuro, todo ello desde la experiencia concreta del hoy, que es un momento sagrado porque es el preciso instante en el cual el "yo" se encuentra unido a la conciencia superior, y desde ahí observa las experiencias pasadas e imagina el porvenir. Si estamos equilibrados y bien centrados en nuestro ser, en ese momento, podemos hacer "magia" en nuestras vidas, todo se nos puede perdonar, y todo se nos puede concretar, sólo debemos desearlo fervientemente.

Pero al mismo tiempo se debe ser responsable, de esos deseos, ya que la sola intención de evolucionar, no alcanza para justificar lo que pedimos, y si bien la ley de causa y efecto se encarga de contabilizar adecuadamente cada acción que realizamos, tanto mejor es armonizarse con la ley natural y actuar conforme a ella.

También es cierto que aquellos destellos de luz que mencionábamos al comienzo, son como una especie de desafío, que nos impulsan hacia lo nuevo casi sin detenernos a pensar, casi irresponsablemente, pero guiados por un sentido que aún no terminamos de desarrollar, como es la intuición, esa sensación que íntimamente nos dice que tal o cual acción habrá de satisfacer alguna necesidad interna que quizás ni tengamos clara, atrayendo a nuestra vida las sincronicidades que harán que la magia se haga presente.

Como ustedes habrán visto la mayor parte de mi trabajo esta orientado hacia la comprensión de los sistemas que nos permitan mejorar nuestra calidad de vida. En algún momento hablar de calidad de vida, hubiese sido algo muy concreto para mí, por ejemplo satisfacer más necesidades con menores recursos, tener más tiempos libres, aumentar el confort, etc. Hoy en día significa mucho más, no quiere decir que aquellos valores no corresponden a esa realidad, pero algo cambió en mi percepción de los contenidos, es como sentir que a medida que ascendemos por los niveles de conciencia, la visión de las cosas se ve ampliada, cada vez se involucran más conceptos, más ideas, y entonces cuando quiero hablar del trabajo, termino refiriéndome a la libertad interior y a la forma en que los deseos influyen en nuestras elecciones diarias. Por un lado, esto me sorprende ya que desde algún lugar, es como querer mezclar el agua y el aceite, pero por otro lado, me agrada poder despegarme de los límites que nos impone la cultura, el conocimiento intelectual de las cosas, la costumbre mecánica de pensar en términos duales, "esto es una cosa "y "aquello es otra cosa...". En algún momento comprenderemos que la diferencia entre el agua y el aceite, no es más que un problema de percepción de los sentidos, hoy sabemos que todo es energía, y en términos más precisos, todas las cosas no son más que átomos rodeados de electrones que giran a una velocidad determinada, dándole una consistencia diferente a la percepción de nuestros sentidos. Recuerdo aquella frase de Descartes: "Los sentidos nos engañan" y en realidad así es, hasta los seres humanos, observados desde una óptica estrictamente física, no somos más que imágenes holográficas de la organización que nuestras energías han tomado conforme a la programación genética establecida al momento de la concepción, es decir que, si pudiéramos observarnos a la luz de un poderoso microscopio, sólo veríamos infinidad de partículas inmersas en un enorme océano de aire o vacío...., que imagen parecida a la de una noche estrellada, verdad? No puedo evitar aquello de que "como es arriba es abajo..." o la idea de que formamos parte de un sistema que a su vez es un mínimo engranaje de otro sistema mayor y así sucesivamente. Hemos supuesto con cierta lógica científica, que somos los únicos seres en el planeta que podemos tomar conciencia de la existencia y elaborar teorías sobre el orden imperante en el Universo, pero guardo ciertas dudas con relación a esta premisa..., por ejemplo: sabemos que grado de conciencia tienen los fotones de luz que convocados por el acto de pensar humano ante la evocación de un recuerdo, se unen ante nuestra imaginación a una velocidad aún insospechada, formando imágenes que sólo guardábamos como recuerdos?

Lo importante que pretendo rescatar con lo expuesto, es que formamos parte de algo mucho más amplio que nosotros mismos, interactuamos permanentemente con ese Todo que parece tener un orden misterioso y aún incomprensible para nuestra mente, que con dificultad y muy lentamente avanza esclareciendo muchos interrogantes pero casi siempre apoyada en el método científico, que parece ser el único que nos da un cierto grado de seguridad a nuestra temerosa existencia. Entre tanto, como indicábamos al comienzo, vamos despejando la ignorancia a través de procesos de crisis, que forzando la comprensión, nos impulsan a evolucionar.

Mantener una actitud abierta y permaneciendo atentos al mensaje encerrado en la confusión que impera en los momentos difíciles, nos permitiremos tener acceso a dar respuestas más creativas a los interrogantes de siempre.

Recordemos que somos aquello que preguntamos, ya que en la contestación comprometemos todo nuestro ser y lo fundamental, es que actuamos conforme a ello, tomando las decisiones que harán de nuestra vida un camino alfombrado de pétalos de rosas o de espinas.

                                                                                                                                                                                                                                      Luis Ramos 

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Revolución Interna

Es necesario un cambio, una transformación, una revolución interna. Para realizar esa transformación tenemos que examinar de cerca lo que es nuestra vida, sin escapar de ella, sin distraernos con creencias y aseveraciones teóricas, pero si observar de cerca lo que nuestra vida es en realidad, y ver si es posible transformarla completamente. Con esa transformación puede que afectemos la naturaleza y la cultura de la sociedad. Tiene que ocurrir un cambio en la sociedad, porque existen tantos males e injusticias sociales, y hay una parodia aterradora de la adoración, etc. Pero el cambio en la sociedad es de importancia secundaria; eso ocurrirá en forma natural e inevitable, cuando como seres humanos, uno en relación con otro, realicemos ese cambio en nosotros mismos.

Podemos observar que en las relaciones de la vida diaria hay conflicto, sufrimiento, y dolor; dependemos de otro constantemente, y en esa dependencia existe la autocompasión y la comparación. A eso le llamamos vivir...

                                                                                                                                                                                                   Fragmento de Krishnamurti

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